sábado, 30 de octubre de 2010

La elevación del fuego crístico.



“El fuego interno (Christos o diosa Kundali) nace en la zona sacra (sagrada) cerca del mundo animal de los primeros chakras y se manifiesta en dos polaridades (Ida y Pingala, luna y sol, la mula y el buey). Desde allí tiene que hacer una peregrinación (la huída) para llegar al perineo o puerta de jade inferior. Luego asciende a través de 33 vértebras, con dificultades especiales en las tres últimas (la vida pública), hasta llegar al Gólgota (el lugar de la calavera). En el camino, el fuego rebota repetidas veces y se puede decir que sufre tres caídas, en las zonas lumbar, dorsal y cervical. Finalmente penetra en el Gólgota donde va a ser crucificado teniendo a la derecha el ladrón bueno (cerebro derecho silencioso) y a la izquierda el ladrón malo (cerebro izquierdo lógico). En el proceso se le coronará con espinas (los doce centros de conciencia en la cabeza, del alfa en lo alto de la frente al omega en la parte baja de la nuca, que al abrirse se sienten como cuchillos). Se le marcará en el pecho donde se estructura el gran triángulo ascendido de Kiristi + Mikha + Mary. Sólo le queda levantar la piedra del sepulcro (abrir de nuevo la fontanela que cuando niños dejaba pasar las percepciones del Espíritu) y de esa manera alcanzará la conciencia de otras dimensiones más elevadas”. 
                                                                                                                               

2 comentarios:

Searcher dijo...

Hola Veteran@!
Gracias por compartir tus conocimientos, me ha parecido muy interesante esta entrada...
No sé si puede tener relación con la cita de Apocalipsis 12,1-2: “1. Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza; 2. está encinta, y grita con los dolores del parto y con el tormento de dar a luz.” (tomada de la Biblia de Jerusalén, a través de http://www.bibliacatolica.com.br/03/73/12.php )
El hemisferio derecho (buen ladrón es el “femenino”) y el proceso se parece al de un parto...
Por otro lado, el marcado en el pecho del gran triángulo ascendido, me recuerda a la apertura de la cápsula en el corazón que encierra la triple llama, de la que hablan en Metafísica, referida también al Cristo Interior...
Un saludo, y gracias de nuevo!

Vtr@ dijo...

Saludos. El momento de ascensión planetaria que vivimos tiene que ver especialmente con la Divina Madre (Isis, María...) y por tanto considero muy acertada tu cita, ya que las tres fuerzas crísticas (padre-Mikha; hijo- Christis y madre-Isis) están en plana actividad en estos momentos en el corazón del ser humano y de la planeta Gaia-Tonantzin. El Sol de la irradiación del amor crístico (en la Tierra y en nuestro pecho); las doce estrellas de María (entre las que se encuentra Teresa de Jesús, Anandamoyee Ma, Mirra Alfassá (Aurobindo), María de Magdala...) que forman la corona de espinas en la cabeza (a veces pinchan cuando se abren los diferentes centros); y el parto de una nueva humanidad que exige purificar totalmente la Tierra (de tanta polución en sus cuatro elementos) por medio de convulsiones y catástrofes varias...
También el marcado en el pecho es tan sólo la evolución del trabajo de la Triple llama y tiene que ver con la cruz marcada entre la base de la garganta, la punta del esternón y el travesaño horizontal encima de las tetillas, además de su centro que es el centro Anahata. Estos cinco puntos, unidos al área de la sede del alma que está entre los omóplatos hacen nacer el corazón irradiante en el medio interior del pecho, que es el séptimo punto en liza.
Un cariñoso saludo y gracias por colaborar en el blog, ¡Buen Camino!
Miyo